No me creas, no confíes,
sabes que no lo puedo evitar.
inventar historias para seducirte,
para ponerte a vibrar.
Trabajo bien con la lengua,
y con las manos también.
Creare mundos para tí
solo para poderte tener.
Tenerte entre mis brazos dormida,
acurrucada, como criatura herida.
besar tu frente mientra sueñas,
con mi promesas de otras vidas.
Hoy me marchó, y digo siempre,
pero ya sabes que hacer.
No me creas nena, no me creas,
que algún día he de volver.
Y volver cómo la olas,
con más fuerza cada vez.
Arrasaré tus castillos,
aunque no sean de arena
y correré entre tus pies.
Y cómo la marea te llevaré lejos.
Lejos y nunca más te soltare.
Pero mientra no me creas,
pero no dejes tampoco de creer.